Ordenación del espacio urbano de la Romareda

2002. Primer Premio (restringido).

2002. Primer Premio (restringido). Nuestra propuesta es una composición que establece las relaciones entre formas moduladas: elaborándolas, tallándolas, transportando materia volumétrica de unas a otras, colocando piezas en función de equilibrios de masas, de proporciones, de compensaciones de volumen, de separaciones con edificaciones existentes, de referencias visuales. Con todo ello se pretende llegar a lo complejo, a la precisión casi matemática, que ayude a resolver el impacto de una excesiva edificabilidad. Tras recorrer distintas posibilidades tipológicas nos decidimos por bloques laminares de profundidad óptima para distribuir funciones y albergar en sus sótanos los aparcamientos. Un solo módulo, preciso, repetido y meditadamente colocado, sirve para conformar toda la propuesta. Es un módulo versátil que permite convertirse en torre con facilidad o desplegarse en desarrollo horizontal. Establecemos una conexión fluida, física y visual, entre las calles Eduardo Ibarra e Isabel la Católica por considerar que debe prevalecer un tránsito continuado y sin interrupciones entre estos dos sectores.»