Pasarela en Dorigny, Lausane
Pasarela en Dorigny, Lausane
2012. En colaboración con MC2.
2012. En colaboración con MC2.
El término “Promenade Architecturale” aparece por primera vez en la descripción de Le Corbusier de la Villa Saboya en Poissy (1928), con el que se busca ampliar y superar el significado del concepto de “circulación”. “En esta casa se produce una verdadera PROMENADE ARCHITECTURALE, ofreciendo constantemente aspectos variados, inesperados y a veces sorprendentes.” L.C. y Pierre Jeanneret. Œuvre Complète Volume 2, 1929-1934. (Zurich. Les Editions d’Architecture, 1995), p. 24. La PROMENADE se diseñaría para volver a sensibilizar a las personas con su entorno, lo que lleva finalmente a un realineamiento de estas con la naturaleza. Dice Le Corbisier: «Usted entra: el Espectacle arquitectónico inmediatamente se ofrece a la vista. Usted sigue un itinerario y las perspectivas se desarrollan con gran variedad «. L.C. y Pierre Jeanneret. Œuvre Complète Volume 1, 1910-1929. (Zurich. Les Editions d’Architecture, 1995), p. 60. Originalmente publicado en 1937. Así, proponemos que la necesidad de conectar el futuro desarrollo urbanístico de Dorigny, al norte de la autopista, con la universidad y la Station UNIL-Dorigny en la orilla suroeste, se configure como una PROMENADE, en la que el viandante pueda disfrutar de la experiencia espacial de hallarse suspendido sobre el terreno, en un recorrido de múltiples perspectivas. Proponemos tres posibles itinerarios: Uno continuo, que será el de mayor desarrollo, con rampas siempre de pendiente inferior al 6%. Otro, el requerido por las bases del concurso, en el que el cambio de nivel se realiza mediante ascensor. Y un tercero, en el que una escalera acompaña al núcleo del ascensor. Tres posibles recorridos, tres alternativas para disfrutar de la experiencia espacial. Para el usuario de la autopista, se busca que la nueva pasarela se perciba como un “gesto” de gran armonía y ligereza. Una leve cinta de apenas 30cm de espesor flota sobre la carretera, en un equilibrio que parece desafiar a las fuerzas de la gravedad. La longitud de la pasarela sobre la autopista se contrapesa con el doble bucle que permite descender desde ésta hasta la Station UNIL-Dorigny. También se busca la “porosidad” de la estructura del ascensor y la escalera, así, evitando que pueda llegar a convertirse en un punto rígido y estático de la “dinámica” composición. El “dinamismo” de la propuesta por las noches se ve reforzado por el encendido secuencial de la iluminación en función del movimiento de los usuarios. A ambos lados de la pasarela, se disponen luminarias lineales de LEDs (máxima eficacia, y mínimo consumo y mantenimiento), que se encienden y apagan activadas por detectores de presencia, según el paso de los usuarios La pasarela, además de la misión fundamental de conectar ambos lados de la autopista, busca que pueda convertirse en un espacio urbano agradable, que invite a su uso y disfrute.